Y es así como la vida sigue, hay que continuar por más que duela y a veces duele y mucho. Aunque la vida no es fácil, es una sola, y para vivirla lo único que tenemos que hacer es poner el pie en el acelerador. No podemos estar confiados de que algo va a durar para siempre, porque a pesar de que lo querramos no es así, el vivir es un ciclo, que continúa aunque no querramos verlo, sigue y sigue aunque querramos pararlo. No sirve de nada pensar que lo que estamos pasando va a durar para siempre, puede que lo hermoso del momento sea sólo eso, el momento, y puede que lo malo que estemos viviendo también sea sólo el momento, porque todo pasa, lo bueno y lo malo también. Es por eso, que hay que disfrutar lo bueno y pensar que lo malo en algún punto va a terminar, puede ser que tarde, y que se sufra en el camino, pero va a terminar pasando y lo vamos a dejar atrás.